La semana pasada comentábamos un artículo de la Dra. Monique Botha, investigadora autista, donde muestra los prejuicios promovidos por la investigación académica que deshumanizan a los autistas. Uno de ellos es la afirmación: en el autismo hay un déficit o ausencia en la «Teoría de la Mente». ¿Respecto de la mente de quién o quiénes? De la mente neurotípica (o del tipo de características que se asume debe tener una mente «normal»). En este orden de ideas, un neurotípico tiene un déficit o ausencia de Teoría de la Mente Autista.
En términos generales, la «teoría de la mente», en los estudios sobre cognición social, alude a la capacidad para atribuir pensamientos e intenciones al otro. Si alguien abre una gaveta puedo suponer que está buscando algo: dar una intención a la conducta de los demás. Nuevamente, esto se da en el contexto de cómo se gesta el desarrollo y manifiesta la mente neurotípica.
Cuando se dice que es una facultad esencial de la mente humana, abrimos la idea (y prejuicio) que el autismo carece de algo esencial para lo humano y que debe remediarse. De allí tantas intervenciones que se basan en la «enseñanza» de la teoría de la mente.
Damian Milton, investigador autista, en su ya célebre artículo «El problema de la doble empatía», señala como una idea incorrecta asumir que existen de por sí un conjunto de normas y reglas que deben ser seguidas. Existen en tanto son las de la mayoría, no porque sean mejores ni preferibles a otras formas en las que se manifiestan los diferentes tipos de mentes en la neurodiversidad. Justamente en la actualidad existen proyectos, desde el paradigma de la neurodiversidad, sobre todo los de la Universidad de Edinburgo, llamados «Diversity in Social Intelligence» («Diversidad en la inteligencia social). Se busca estudiar y valorar la «inteligencia social» tal como se manifiesta en los diferentes neurotipos, especialmente el autista.
¿Podemos enseñar Teoría de la Mente Neurotípica? La respuesta debería considerar el «para qué». ¿Podríamos enseñarle a los neurotípicos cómo se piensa en clave autista? Deberíamos, pero al mismo o tiempo no podríamos hacerlo de manera completa dado que estamos hablando de dos neurologías distintas.
No debemos enseñar Teoría de la Mente Neurotípica porque creamos que hay un déficit en el autista y busquemos normalizarlo («humanizarlo»). Debemos hacerlo como bien señalan las autistas @my_autistic_self y Alba (Autista de la hostia) en Instagram, principalmente porque permite comprender la «inteligencia callejera» («street smart») que es el saber acerca del mundo neurotípico que permite, comprendiendo las intenciones y formas neurotípicas, sobrevivir a situaciones peligrosas y protegerse.
Dicho todo esto, para quienes enseñan o promueven la enseñanza de la Teoría de la Mente: ¿lo hacen pensando que el autista presenta un déficit en ese campo «humano»? ¿ Cómo va su aprendizaje en Teoría de la Mente Autista?