El ABA NO es efectivo: así lo dice el último reporte del Departamento de defensa de Estados Unidos. (Traducción del activista autista Mario Puga Valera).

Barry R. Nathan, PhD. Therapist Neurodiversity Collective. Se puede leer el original aquí: https://therapistndc.org/aba-is-not-effective-so-says-the-latest-report-from-the-department-of-defense/

Durante los últimos cinco años, el Departamento de defensa [de los Estados Unidos] (DoD) ha invertido más de $1.53 mil millones en servicios de ABA, servicio para casi 16 mil individuos con TEA. El costo promedio por participante durante el año fiscal 2019 fue $23,253. En 2016, el Congreso [de los Estados Unidos] autorizó otorgar fondos para un reporte que examinara si los servicios de ABA que estaban pagando eran efectivos. Como todo servicio de seguro militar, dichos servicios son administrados por medio del seguro TRICARE, programa de salud para miembros de los uniformados de los Estados Unidos, incluyendo miembros activos, retirados y sus familias alrededor del mundo.

Con 3,794 participantes, este es el mayor estudio conducido sobre la efectividad de ABA. El reporte de 31 páginas, titulado «Reporte comprensivo anual del Departamento de Defensa sobre Demostración de cuidados para el autismo 2020» concluye que «los servicios de ABA no funcionan«.

Específicamente, indican (página 24 del reporte):

«… estos hallazgos demuestran que… la impartición de servicios ABA no está funcionando para la mayoría de los beneficiarios del TRICARE en la ACD [demostración de cuidados para el autismo].»

«… el Departamento sigue muy preocupado por estos resultados, y si el diseño actual de esta demostración, así como, específicamente, los servicios ABA, proporcionan los servicios más apropiados para nuestros beneficiarios diagnosticados con TEA.»

Este fue el segundo reporte preparado para el Congreso por el DoD que señalaba que el ABA NO es una terapia efectiva para individuos con autismo. En el reporte del año pasado, de más de 709 individuos con autismo, el 76% no mostró mejoras tras un año de tratamiento, el 16% había mejorado, pero un 9% empeoró tras el año de tratamiento. Para ambos estudios, los resultados se basaron en el Inventario conductual del Trastorno generalizado del desarrollo (PDDBI [por sus siglas en inglés]; Cohen y Sudhalter, 2005). El PDDBI es una escala de evaluación completada por los padres cada seis meses.

Además del PDDBI, se requirieron de otras dos mediciones de resultados, como parte de la Demostración de cuidados en autismo del Departamento de defensa: la Eescala de conductas adaptativas de Vineland, tercera edición (Vineland – 3), la cual mide el funcionamiento de conductas adaptativas, y la Escala de respuestas sociales, segunda edición (SRS-2 [por siglas en inglés]), la cual mide dificultades sociales relacionadas con la TEA (los datos provenientes de tales mediciones no fueron reportados, dado que ningún participante tuvo los dos años necesarios de datos básicos requeridos para tales evaluaciones).

Análisis-1: Cambios pre-pos en las puntuaciones de la PDDBI tras 18 meses:

En este reporte, se vieron los cambios pre-pos (sin grupo de control) en puntuaciones de la PDDBI tras 18 meses. Si bien encontraron pequeños, pero estadísticamente importantes, avances en las puntuaciones de la PDDBI, concluyeron que, pese a su importancia estadística, «no queda claro si alguno de los cambios es de importancia clínica» (página 19). En otras palabras, que algo resulte estadísticamente importante no significa que sea realmente valioso. Más todavía, señalaron que, sin un grupo de control, no era posible atribuir tales avances al ABA o a la maduración con el tiempo, puesto que algunos de estos chicos estaban llevando otros tratamientos simultáneamente.

Análisis-2: Relación del número de horas en servicios ABA con puntuaciones de la PDDBI

Si el ABA está causando la mejora en las puntuaciones de las PDDBI, entonces se esperaría que, a más horas de tales servicios, más altas resultarán tales puntuaciones. NO sucedió así; no hubo correlación entre las horas en servicios ABA y las mejoras en las puntuaciones de la PDDBI. De hecho, algunos de los subgrupos mostraron una relación negativa, es decir, a más horas de servicios ABA, menores resultaban las puntuaciones en las PDDBI. «En otras palabras, el número de horas no parece tener impacto sobre los resultados» (página 21).

Revisión de investigaciones – además de la falta de evidencia con respecto a la efectividad del ABA, los investigadores revisaron otros estudios médicos. Reportaron que:

«Dos servicios respetables de revisión de literatura médica, externos al DHA, continúan encontrando que la evidencia de la efectividad de servicios ABA (intervención conductual intensiva) para el diagnóstico de TEA es débil…».

«La literatura de investigación disponible con respecto a los servicios ABA predominantemente consiste en estudios diseñados para un solo caso, lo cual no cumple con los criterios para «evidencia confiable» bajo los estándares del TRICARE» (página 16).

Conclusión:

La demostración comprensiva de cuidados para el autismo del Departamento de defensa es el único estudio a gran escala conducido sobre el ABA. La única conclusión a la que se puede llegar es que el ABA no es efectivo.

Algunos podrían responder que este solo es un estudio comparado con los múltiples estudios que apoyan la efectividad del ABA. Basado en un conteo de estudios, esto podría ser cierto. Pero, en un metaanálisis apropiado, la inclusión debe medirse por el número de participantes en cada estudio. Cuando se sopesan con este estudio a gran escala, añadir esos estudios de un solo caso resultarían poco más que errores de redondeo; sus efectos no solo resultarían insignificantes, también serían invisibles.

Este blog reportó sobre la ausencia de pruebas con respecto a la efectividad del ABA. Mi blog anterior (https://therapistndc.org/fundamental-research-problems-bcs-asd/) presentó el caso en contra de la Junta certificada especializada en el trastorno del espectro autista (BCS-ASD) que la ASHA parece estar apoyando. Un blog posterior reportará sobre investigaciones que cuestionen la seguridad del ABA.

ACTUALIZACIÓN: Informe completo del Departamento de Defensa de Estados Unidos.

Por Ernesto Reaño

Hola a todos y todas, soy psicólogo y lingüista. Estudié psicología clínica en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Hice mi máster en Ciencias del Lenguaje por la Sorbonne Nouvelle Paris – III (Francia). Realicé especializaciones doctorales en la Universidad Autónoma de Madrid y la Université de Limoges. Hice mi doctorado en Ciencias del Lenguaje por la Université Sorbonne Nouvelle Paris - III (Francia). Desde el 2008 en que regresé al Perú, me a la investigación, dignóstico e intervención en Condiciones del Espectro Autista En el 2009 fundé el Equipo de Investigación y Trabajo en Autismo (EITA). Doy conferencias, seminarios y talleres en el Perú y en el extranjero y soy profesor universitario desde el 2006. En el 2007 escribí el libro “El retorno a la aldea. Neurodiversidad, autismo y electronalidad.” Fui invitado a la ONU el 2 de abril de 2019 en el marco del día mundial de concientización del autismo “Tecnologías de asistencia, participación activa” como ponente en el panel “Comunicación: un derecho humano”.

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